SOSPECHAS DE CORRUPCION
Boudou se defiende con su argumento habitual: "es una operación mediática"
En un raid por mayoría de medios oficialistas, y mientras la Justicia investiga sus gestiones en favor de la empresa Ciccone Calcográfica, el vicepresidente apuntó contra Duhalde. Contradicciones.LaRazon
Mientras la Justicia investiga presuntas actividades del vicepresidente Amado Boudou incompatibles con la función pública -causas que llevan el juez Daniel Rafecas y el fiscal Carlos Rívolo- el ex ministro de Economía emprendió en las últimas 48 horas un vertiginoso raid mediático, tratando de despegarse. Pero, entre sus actitudes y palabras dubitativas, y sus continuas contradicciones, no hizo más que confirmar muchas de las sospechas. Sobre todo por sus presuntas gestiones en favor de la empresa Ciccone Calcográfica, que dirigen sus allegados.
Desde que estalló el caso, hace varias semanas, y se acumularon las denuncias sobre Boudou, éste había mantenido un absoluto silencio. Inclusive, algunas de las denuncias sobre Boudou provenían del mismo kirchnerismo. Lo único que hizo desde entonces el vicepresidente fue lucir una remera con su latiguillo habitual ("Clarín miente"), sin responder directamente a las acusaciones y apelando al mismo recurso de tanto tiempo.
Ahora cambió. Después de pasar por el programa ultraK 67-8, le brindó reportajes a otros dos diarios oficialistas, Ambito Financiero y Página 12. Y siguió ayer con otro ultraK como Víctor Hugo Morales en Radio Continental (también fue entrevistado por Jorge Rial en La Red y, por la noche, en C5N). Esta vez, su estrategia fue apuntarle también al ex presidente Eduardo Duhalde. Pero insistió en su ofensiva contra los medios. Acusó a editores y periodistas de Clarín y La Nación de tener "actitudes destituyentes" y los llamó "operadores políticos encubiertos".
En los reportajes a los diarios, había apuntado contra la firma "Boldt, de la familia Tabanelli, que se quedó con todo el sistema de juego electrónico de la provincia de Buenos Aires". Y después de insistir en ese punto, acusó a Duhalde "de estar atrás de toda esta operación mediática". De paso, también responsabilizó al ex titular del Banco Central, Martín Redrado. Este le respondió anoche: "Con sus actitudes y declaraciones, Boudou demuestra que está totalmente perdido", le disparó por Radio El Mundo.
MARATON
En su maratón de declaraciones, Boudou admitió que es amigo y socio de José María Núñez Carmona. Pero dijo desconocer que éste trabajase con Alejandro Vandenbroele, el ex monotributista que -sospechosamente- levantó la quiebra de Ciccone y a quien su ex mujer acusó, en la Justicia, de ser testaferro del Vicepresidente.
Después de afirmar que "los billetes se harán solo en la Casa de la Moneda", Boudou admitió que le enviaron papel y tinta especial a Ciccone para hacer pruebas. Boudou, en cambio, no explicó porqué la misma empresa fue elegida para la impresión de las boletas electorales del Frente para la Victoria. El único latiguillo de Boudou es que "se trata de una operación mediática".
Desde que estalló el caso, hace varias semanas, y se acumularon las denuncias sobre Boudou, éste había mantenido un absoluto silencio. Inclusive, algunas de las denuncias sobre Boudou provenían del mismo kirchnerismo. Lo único que hizo desde entonces el vicepresidente fue lucir una remera con su latiguillo habitual ("Clarín miente"), sin responder directamente a las acusaciones y apelando al mismo recurso de tanto tiempo.
Ahora cambió. Después de pasar por el programa ultraK 67-8, le brindó reportajes a otros dos diarios oficialistas, Ambito Financiero y Página 12. Y siguió ayer con otro ultraK como Víctor Hugo Morales en Radio Continental (también fue entrevistado por Jorge Rial en La Red y, por la noche, en C5N). Esta vez, su estrategia fue apuntarle también al ex presidente Eduardo Duhalde. Pero insistió en su ofensiva contra los medios. Acusó a editores y periodistas de Clarín y La Nación de tener "actitudes destituyentes" y los llamó "operadores políticos encubiertos".
En los reportajes a los diarios, había apuntado contra la firma "Boldt, de la familia Tabanelli, que se quedó con todo el sistema de juego electrónico de la provincia de Buenos Aires". Y después de insistir en ese punto, acusó a Duhalde "de estar atrás de toda esta operación mediática". De paso, también responsabilizó al ex titular del Banco Central, Martín Redrado. Este le respondió anoche: "Con sus actitudes y declaraciones, Boudou demuestra que está totalmente perdido", le disparó por Radio El Mundo.
MARATON
En su maratón de declaraciones, Boudou admitió que es amigo y socio de José María Núñez Carmona. Pero dijo desconocer que éste trabajase con Alejandro Vandenbroele, el ex monotributista que -sospechosamente- levantó la quiebra de Ciccone y a quien su ex mujer acusó, en la Justicia, de ser testaferro del Vicepresidente.
Después de afirmar que "los billetes se harán solo en la Casa de la Moneda", Boudou admitió que le enviaron papel y tinta especial a Ciccone para hacer pruebas. Boudou, en cambio, no explicó porqué la misma empresa fue elegida para la impresión de las boletas electorales del Frente para la Victoria. El único latiguillo de Boudou es que "se trata de una operación mediática".
FUENTE:Publicado en www.larazon.com
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