¿Escuchas los gritos? Nunca había visto a las élites mundiales tan nerviosas… tiran advertencias de la “burbuja de las criptomonedas” todos los días…
“Todas las generaciones quedan atrapadas”. –Shane Oliver, de AMP Capital
“El bitcoin es un fraude que terminará desplomándose”. –Jamie Dimon, jefe de JP Morgan
“El bitcoin es un Enron en proceso”. –Alwaleed, Príncipe Saudí
¡Gracias por sus preocupaciones, millonarios del mundo!
Porque… ¿serán estas unas raras muestras de preocupación sincera hacia nosotros los plebeyos? ¿O será algo más?
Es gracioso…
Durante las otras burbujas de la historia hubo una fuerte escasez de todas estas advertencias…
Considera lo que pasó a principios del 2007, antes de que llegara la crisis financiera global.
En ese entonces la actitud de las élites era algo así:
“Si la música está sonando, aprovecha y comienza a bailar”. –Chuck Prince, Citi Group.
En ese entonces estuve en varias presentaciones de fondos de cobertura que básicamente decían que el boom minero chino seguirá para siempre y que todos nos haríamos ricos en el camino.
Y luego, cuando todas esas frases se fueron por el retrete, junto con la economía…
Pero aquí hay algo que convenientemente decidieron dejar tras bambalinas: ¡muchas de las mayores firmas del mundo en realidad hicieron dinero durante el derrumbe!
Un reporte de 639 páginas publicado por el Senado estadunidense en 2011 descubrió que cuando llegó la crisis financiera:
“Goldman (Sachs) hizo esfuerzos desenfrenados para proteger sus propios intereses al comienzo de la crisis y vendió derivados relacionados a las hipotecas a precios inflados, presentando erróneamente la naturaleza del trato a sus clientes”.
Goldman Sachs consiguió US$ 50.000 millones en ventas solo dos años después –las ganancias más grandes en la historia de la firma. Solo dos años después de engañar al mundo, a sus clientes e incluso al gobierno estadounidense…
Este fue algo que terminaron admitiendo, por lo que tuvieron que pagar US$ 5.000 millones en multas en el 2016.
¿Y qué pasó con las compañías menos inteligentes (o debería decir, menos “conectadas”) que sí perdieron dinero? Bueno, también sobrevivieron gracias a los rescates del gobierno.
En el 2008, Estados Unidos había implementado un programa de rescate financiero de US$ 700.000 millones, en lo que fue el mayor acto de caridad corporativa en la historia.
Y los bonos ejecutivos volvieron a alcanzar nuevos máximos históricos solo 12 meses después…
Desde entonces no ha parado la impresión de dinero destinada a darle impulso a la industria bancaria, dando como resultado en boom actual en la Bolsa y en propiedades a lo largo y ancho del mundo.
No te equivoques: éste es el sistema que las élites quieren mantener.
¿Y por qué no querrían? Si ya tienen el juego solucionado.
Entonces cabe preguntarse: ¿a qué se deben las preocupaciones cada vez más notables que tienen las élites con las criptomonedas?
¿Por qué se la pasan asustando a los demás con advertencias de burbujas y dudas?
Hay dos posibles respuestas a esas preguntas:
1. Se trata de un benévolo acto de conciencia y preocupación sincera por parte de la clase dominante.
2. Están es intentando detener es una amenaza a su propio poder.
Para mí, claramente, es la número 2.
Creo que las élites cayeron en cuenta súbitamente de la amenaza que los acecha, y nada más están reaccionando como deberían en una situación así.
Seguramente has escuchado que “el dinero es poder”.
Como dijo Mayer Rothschild en 1838: “dame la capacidad de emitir y controlar el dinero de una nación, ¡y no me va a importar en lo más mínimo quién hace las leyes!”.
En este momento es muy pequeño el grupo de personas que controla la oferta monetaria, por lo tanto, tienen el poder.
Pero eso no será así por mucho más tiempo…
El orden mundial cripto
Las criptomonedas ofrecen un nuevo paradigma en el dinero –uno que no está bajo el control de nadie.
Por ejemplo, bitcoins solo habrá 21 millones.
Nadie puede cambiar esto, por más poder que tenga.
En este momento no hay suficientes bitcoins para que cada millonario del mundo tenga el suyo, si los quisieran. Esta escasez intrínseca trae consigo un valor tremendo.
Cada criptomoneda está diseñada siguiendo reglas específicas que ningún grupo individual controla.
Es un cambio total en el paradigma del dinero.
De repente tú y yo estamos al mismo nivel que los ricos y poderosos. ¡¿No te parece que eso es simplemente impresionante?!
Ahora bien, generalmente bajo estas condiciones las élites intentarían acabar con este sistema. Y eso es exactamente lo que han estado intentando.
Prohibiciones gubernamentales, intentos de regulación, persecuciones. Lo han intentado todo por más o menos una década –y nada ha funcionado.
Las criptomonedas siguen en su ascenso de igual manera. Son descentralizadas, ágiles y tecnológicamente superiores.
Ahora se están dando cuenta de que no se pueden deshacer de ellas.
Es necesario hacer un cambio táctico.
Así que la estrategia ahora es intentar controlarlas –ser su dueño.
Pero… ¿adivina qué? Esto en realidad es muy difícil de lograr.
Verás, muchas de estas criptomonedas aún son pequeños renacuajos en comparación con el valor total de los mercados que están alterando.
A US$ 137.000 millones, el bitcoin todavía representa solo un 1,8% del mercado total de oro mundial, y el bitcoin representa un 56% del mercado completo de las criptomonedas.
Su problema es este: los ricos no puede comprar en un mercado tan “pequeño” sin demostrar que tienen intenciones de controlarlo (lo que impulsaría los precios desenfrenadamente).
Así que en lugar de eso están intentando que la gente normal evite el mercado y vendan sus criptomonedas por pánico o miedo. O por lo menos intentan que no sean competenciaa para sus propias.
Estamos hablando de economía básica.
Si eres el que está comprando, intenta reducir la demanda e incrementar la oferta.
Podrías pensar que esto es manipulación de mercado.
¡Y claro que lo es!
Pero también debes saber que hoy tienes una oportunidad única para tener una participación en el nuevo orden mundial antes de que las élites puedan hacer algo al respecto.
Por supuesto, existen criptomonedas que son una estafa, y hay otras que simplemente fracasarán. Y al igual que en todo lo demás, habrá ganadores y perdedores.
Pero pase lo que pase, las criptomonedas no se van a ningún lado.
Y cuando la cuestión se calme un poco, verás que estaremos en una nueva era –en un nuevo orden mundial.
Si actúas ahora, puedes formar parte de esto. Será algo conformado por gente común y corriente que tuvo la persistencia de resistir los golpes, atravesar los altibajos y apostar por un futuro mejor y más justo.
Donde además podrás ganar dinero en el camino
La elección es tuya.
Saludos,
Louis Basenese.
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