El secreto para ganar con el nuevo iPhone y toda la nueva generación de teléfonos inteligentes que lo seguirán es muy simple: estar encima de la cadena de proveedores de Apple.
Apple lanzó el iPhone original en el verano boreal de 2007. Para ese entonces, la compañía ya contaba con una base fiel de seguidores, gracias a sus computadoras y reproductores de música.
Su nuevo teléfono rebosaba de “features” sumamente útiles, y había muchas ansias por su lanzamiento.
El éxito estaba prácticamente garantizado.
Quienes se adelantaron, ganaron (y mucho): los inversores que tuvieron fe en el primer teléfono de la compañía multiplicaron su capital casi diez veces en el transcurso de una década.
Ahora, con el décimo aniversario del iPhone aproximándose, puedes estar seguro de que Apple querrá demostrarle al mundo que aún sigue siendo un importante innovador. La compañía se está preparando para anunciar la versión más nueva de su icónico smartphone, y no me cabe duda alguna de que van a llenarlo de tecnologías nuevas.
Los periodistas y analistas tecnológicos llevan semanas especulando sobre qué clase de features podremos en encontrar en la nueva generación del teléfono y es probable que los fanáticos de Apple ya estén planeando acampar fuera de las tiendas a la espera del nuevo teléfono. Por su parte, muchos inversores (novatos) están proyectando que las acciones de la compañía se dispararán a raíz de las ganancias que se logren a partir de esas nuevas ventas.
Pero para los inversores más expertos, Apple no es la mejor manera de obtener grandes ganancias. Ten en cuenta que para poder alcanzar la rentabilidad que las acciones de Apple consiguieron con el lanzamiento del primer iPhone, sus acciones tendrían que subir un 75% en tan solo seis meses.
Sumergiéndose en las nuevas “súper ganancias”
Que volvamos a ver ese 75% en seis meses es simplemente imposible, incluso si el iPhone 8 llegara a ser un éxito rotundo. En los últimos cinco años, durante los cuales se lanzaron tres iPhones nuevos con modificaciones pequeñas, las acciones de Apple han promediado un crecimiento anual de solo 13,5%.
Así que si tienes intenciones de hacerte con ganancias exorbitantes con el próximo lanzamiento de Apple, no vas a tener que enfocarte en qué es lo hará, sino en cómo lo fabricará. Como decía, muchos de los componentes esenciales del iPhone provienen de otras compañías –todas con un historial que demuestra su capacidad para alcanzar los altísimos niveles de exigencia del gigante tecnológico.
Sin embargo, más importante aún es el hecho de que las acciones de muchas de estas compañías cotizan por solo una fracción de las de Apple. Si uno de estos fabricantes más pequeños es siquiera mencionado en el lanzamiento del iPhone, sus acciones se van a disparar directo a la estratosfera.
Y en vista de que podrás invertir en estas compañías a un precio relativamente bajo, tus ganancias fácilmente superarían las que hubieses obtenido invirtiendo en fabricantes grandes y bien establecidos.
Qué haré yo al respecto: a medida que se revela la cadena de proveedores de Apple, estaré al acecho de nuevas y mejores maneras de sacarle provecho al fenómeno del iPhone.
Que deberías hacer tú: no perderte ninguna de nuestras comunicaciones, en cualquier momento podemos enviar un alerta para actuar rápido.
Por un futuro mejor,
Ray - EL INVERSOR DIARIORay Blanco es editor senior de Agora Financial, socio estratégico de Agora Publicaciones con sede en Baltimore, Maryland.
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