El gobierno chino proseguirá la estabilidad económica, mientras que la profundización de las reformas económicas, en medio de las crecientes dificultades económicas en el país y el aumento de la incertidumbre global. Li Keqiang hizo esta declaración durante la apertura de este año del Congreso Nacional del Pueblo (CNP), que se desarrolló del 5 al 15 marzo. En general, los objetivos y las políticas económicas, al descubierto en el NPC estaban en línea con el modelo presentado en la Conferencia Central de Trabajo Económico (CEWC), celebrada en diciembre, con algunos cambios relativamente menores. Al presentar el informe de trabajo gubernamental, Li anunció una reducción de la meta de crecimiento del país a partir de un rango de 6,5% -7,0% a 6,5%. El objetivo de crecimiento para la inversión en activos fijos nominal se redujo en 1,5 puntos porcentuales, hasta el 9,0% (2016 Resultado final: + 8,1%), mientras que el objetivo de crecimiento para las ventas minoristas nominales se redujo de 11,0% a 10,0% (2016 Resultado final: 10,4 %). Inesperadamente, el gobierno aumentó su nuevo objetivo empleos urbanos en 1 millón a la 11 millones (2016 resultado final: 13,1 millones). La meta de inflación para este año es de 3,0%, igualando el objetivo en los dos años anteriores.
Las principales prioridades fiscales para el gobierno para este año será el fortalecimiento de la inversión en la infraestructura pública, la vivienda social y el bienestar social. Aunque la meta de déficit fiscal se mantuvo sin cambios en el 3,0% del PIB y Li reafirmó que el gobierno continuará con su política fiscal proactiva, las autoridades es probable que incurrir en más deuda a la prevista inicialmente después de levantar la emisión prevista de bonos del gobierno local de CNY 400 mil millones de CNY 800 mil millones. Por otra parte, el gobierno depende fuertemente de las medidas cuasi-fiscales para financiar proyectos de infraestructura, que no están incluidos en el presupuesto objetivo. En este contexto, nuestro panel de analistas creen que el déficit para 2017 llegará realmente a 3,9% del PIB. En el frente fiscal, el gobierno dio a conocer también la reducción de impuestos para las pequeñas empresas y una mayor deducción para la investigación y el desarrollo, entre otras iniciativas para fomentar la actividad privada.
Las autoridades reiteraron su política monetaria prudente, pero agregó que también será neutral. Esta ligera ajustes de la redacción, combinado con una menor tasa de crecimiento de M2 y para la financiación social total de alrededor de 13,0% a 12,0%, señalan una tendencia al ajuste marginal para este año. A pesar de la reducción del objetivo de crecimiento del crédito, la política monetaria sigue siendo acomodaticia y debe apoyar el objetivo de crecimiento económico de este año. Por otra parte, Li destacó que el Gobierno seguirá de cerca los posibles riesgos financieros, incluida la financiación sombra y la morosidad.
Reducir el exceso de capacidad (en particular en la producción de carbón y acero) permanece en la agenda, pero los objetivos se redujo tras los recortes de producción más grandes de lo esperado del año pasado en algunos sectores. Reformas a las empresas públicas (SOE) continuarán este año se centra en propiedad mixta, en particular en los sectores de electricidad, petróleo, gas natural y de ferrocarril. En cuanto al mercado inmobiliario, Li anunció un enfoque de dos velocidades de fomentar la compra de vivienda en el nivel 3 y 4 ciudades, mientras aumenta la oferta de suelo y manteniendo algunas restricciones en las ciudades que han experimentado un fuerte aumento de los precios.
A pesar de que la sombra de una guerra comercial entre China y Estados Unidos colgaba sobre la cumbre, los funcionarios no dan a conocer cualquier cambio significativo en la política comercial. Li se comprometió a fortalecer los lazos de China con sus vecinos asiáticos, por lo que la iniciativa "Una correa de un camino" la piedra angular de la política de apertura de China.Al margen de la reunión, Li destacó la importancia de las relaciones entre China y EEUU y subrayó que China no quiere una guerra comercial con los EE.UU., antes de la reunión prevista entre Donald Trump y Xi Jinping, en abril.
Con una economía navegando sin problemas, las autoridades están abordando gradualmente los efectos secundarios derivados de apoyo a la política en negrita en los últimos años. Sin embargo, una fuerte corrección en el mercado inmobiliario o una guerra comercial entre las dos mayores economías del mundo podrían llevar a las autoridades a depender de recibos de edad para apuntalar el crecimiento, lo que a su vez podría descarrilar las reformas económicas necesarias y aumentar los riesgos financieros.Nuestros panelistas esperan que el PIB se expanda un 6,5% en 2017, lo que es de hasta 0,1 puntos porcentuales respecto a la estimación del mes pasado. En 2018, el panel prevé un menor crecimiento económico del 6,1%.
FUENTE ENVIADO DESDE FOCUS ECONOMICS
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