Moyano también promete “ir por todo”
Gustavo Sylvestre Periodista
Cronista.com                    

 Si ellos van por todo, nosotros también vamos por todo. La frase se escuchó en el ultimo plenario del gremio de Camioneros, que conduce Pablo Moyano, y fue en el contexto que definieron las medidas de fuerza que comenzaron a tomarse ayer. El gremio pide un 30% de aumento en las paritarias, pero básicamente quiere que se restablezcan las Asignaciones Familiares y la eliminación del Impuesto a las Ganancias.
Como nunca antes, la cuerda se ha tensado al máximo entre Camioneros y el Gobierno. Ningún funcionario de jerarquía del Ministerio de Trabajo recibió en las ultimas horas a Pablo Moyano, lo que encrespó aún más las ya turbulentas aguas de esa relación. “Nos ningunea, nos hacen atender por funcionarios de cuarta. Tomada no nos atiende cuando antes al menor síntoma de conflicto corría a llamarnos por teléfono”, explican en las cercanía del dirigente gremial.
Si el viernes no hay acuerdo, la semana próxima Camioneros decretaría un paro nacional por 48 horas, que abarcaría las 14 ramas del transporte que están en el gremio.
La medida tomada ayer amenaza con desabastecer de combustible a las estaciones de servicio y el gobierno amenaza con aplicar la ley de desabastecimiento, que implica no sólo sanciones al sindicato, sino también poner presos a dirigentes y ordenar la inmediata distribución del vital elemento. Si bien se debe cumplir con una ley para evitar desabastecimiento, implicaría la declaración de guerra total entre ambas partes.
El conflicto estalla en medio del proceso de elección de la nueva conducción de la CGT, de la que Moyano no se baja, y por el contrario, pone todos los motores en la elección del 12 de julio. Al mismo tiempo de marcar su reelección al frente de la Central Obrera, ese mismo día, lanzaría un paro nacional en fecha a confirmar.
El sector que lo enfrenta, Gordos, Independientes y Barrionuevistas avanza en la idea de un Triunvirato, que reuniría a un representante de cada sector. Antonio Caló ha quedado debilitado, por las declaraciones del domingo donde dijo que “moría por el modelo”. “Quemó etapas, nadie le pidió que exagerara, seguramente los independientes lo postularán a él para el triunvirato, pero habrá que ver si queda”, dice uno de los astutos gordos que “rosquean” la nueva CGT.
“Moyano quedará en minoría con su gente, nosotros a través de este triunvirato tendremos la mayoría de los gremios más fuertes”, sostiene la misma fuente, que da por segura una próxima reunión con el Ministro de Trabajo, Carlos Tomada, para que “bendiga” la nueva estrategia diseñada por los sectores que se oponen a Moyano.
Si la idea del triunvirato prospera, Luis Barrionuevo colocaría uno de sus hombres de confianza en el mismo y quedaría dentro de esa CGT. “Hay que renovar las estructuras, nosotros ya no corremos más”, se le escuchó decir al gastronómico, que no ahorra críticas a la Presidenta, pese a que estará en esta CGT.
“Lo de Barrionuevo es una vergüenza, despotrica contra la Presidenta, las barbaridades que nosotros le hemos escuchado decir sobre la Presidenta, y ahora se va a ir a reunir con Tomada, es un papelón”, dicen desde la vereda de enfrente, es decir desde las cercanía de Moyano. Y agregan: “Nosotros vamos al frente con los pedidos en contra del impuesto a las ganancias, y ellos están escondidos rosqueando, es una vergüenza lo que hacen”.
La próxima semana se concretaría la reunión de Tomada con estos sectores de la CGT. Y no se descarta que de avanzar ya la idea del triunvirato sea la propia Presidenta quien los reciba. Sería un gesto de total hostilidad a Hugo Moyano, quien hace un año tiene pedida una reunión de la cual nunca tuvo respuesta.
FUENTE:Publicado por cronista.com