Corrupción, narcotráfico e impunidad en Formosa. 
 Aseguran que es insoportable la corrupción moral que reina 
Desde el Centro de Estudios Políticos Económicos y Sociales "Nelson Mandela" dieron a conocer un contundente informe presentado en el encuentro regional celebrado el pasado fin de semana en la provincia del Chaco, donde además de los "deplorables índices económico - sociales" que nos condenan y consagran como la abanderada del "atraso, la marginación y la pobreza" en la región, se cuestionó severamente la degradación institucional, la falta de independencia del poder judicial, los súper poderes conferidos al gobernador por la Legislatura provincial, la profunda corrupción administrativa reinante, el fondo unificado, el auge de las drogas y su impune conexión con encumbrados funcionarios y dirigentes del partido de gobierno.
En el informe también se abordó la difícil situación económica, productiva y laboral en la provincia, donde responsabilizaron tanto del estancamiento histórico como del brusco párate económico de los últimos tiempos, a los coletazos de la crisis internacional -que pensaron no iba a llegar-, a los resultados directos de políticas económicas erráticas, a décadas de desgobierno local y a un escandaloso y permanente "saqueo de fondos públicos en la provincia", donde -aseguran- el único negocio rentable es la corrupción, el peculado y el enriquecimiento ilícito de los funcionarios del gobierno de Gildo Insfrán.
Lo más grave de "el modelo" según el doctor Juan Eduardo Davis "es la cantidad de funcionarios directa o indirectamente sospechados de connivencia con el narcotráfico, y donde como siempre la justicia mira para otro lado, porque es más fácil criminalizar a los pobres y desvalidos que enjuiciar a los corruptos y narcotraficantes". "También es preocupante el creciente aparato "represivo e intimidatorio" que están montando para acallar los reclamos sociales", señalo el letrado.
CRISIS MORAL GENERA ESTRAGOS
"Este estado de profunda crisis moral, de falta de justicia, garantías y libertades generalizadas que vivimos en Formosa, está -más que nunca- causando estragos en toda la geografía provincial, con una justicia paralizada, domesticada, corrompida hasta sus cimientos, y sumida en una crisis de credibilidad por jueces designando a dedo -sujetos solo a criterios de parentescos y/o políticos, que hacen imposible que la ciudadanía pueda encontrar justicia donde no la hay", expresó.
"Los Formoseños estamos prisioneros en nuestra provincia, somos rehenes de un régimen opresivo, donde el pensar distinto te convierte en enemigo y -automáticamente- en perseguido, un feudo donde solo pueden hacer negocios, prosperar y amasar fortunas instantáneas los amigos del poder que negocian con el gobierno y los funcionarios, que generalmente también son proveedores o socios de empresas de sus parientes. Y, por supuesto los narcotraficantes que manejan el poder económico producto de lavados de dineros ilegales, todo con la protección del gobierno, la impunidad que brinda la justicia y la inoperancia de un poder legislativo que únicamente opera para refrendar ciegamente lo que manda el poder político", explicó Davis.
"La división republicana de los poderes, los controles constitucionales al poder y la administración de justicia son ya una utopía en Formosa, y lo más peligroso es que Gildo Insfrán quiere exportar este modelo a todo el territorio nacional. Es de preguntarse entonces ¿qué futuro le espera a la argentina, sometida a un régimen feudal cuasi monárquico, con reelección indefinida de una familia gobernante?", advirtió.
"En este estado de situación -señalo el abogado formoseño- podemos decir que si el pueblo no reacciona y da un golpe de timón, vamos a terminar siendo todos ciudadanos de segunda y de tercera categoría, como en Formosa, donde solo tienen oportunidades los que pertenecen a la nueva oligarquía creada por Gildo Insfrán, quien impunemente ya fue ungido por el presidente de la Cámara de Diputados como sacrosanto pontífice de Formosa, y esto no es poca cosa, es decir que el régimen no se contenta con el poder terrenal, pretende el poder sobre las conciencias de las personas", concluyó el doctor Juan Eduardo Davis. 
Fuente: Opinión Ciudadana