viernes, 14 de febrero de 2014

El año pasado cerró con un déficit de $ 85.928 millones, casi el doble que en 2012

En 2013 los gastos crecieron un 19% más de lo previsto en el presupuesto original, mientras que la recaudación sólo se incrementó un 5%. Y aunque se pensaba terminar el ejercicio con un superávit de $ 504 millones, se alcanzó un resultado financiero negativo que supera en un 94% la performance de 2012, también deficitaria. Por otra parte, 2011 cerró con un rojo de $ 37.268 millones.
Especial El Auditor.info
Si bien las estimaciones iniciales del Presupuesto 2013 suponían que el ejercicio cerraría con un superávit de $ 504 millones, los números volvieron a dar negativos y la diferencia entre los ingresos y los gastos del año pasado arrojó un déficit de $ 85.928 millones.
El resultado financiero negativo se explica por la diferente evolución de los Recursos Totales, es decir, el dinero que ingresó a las arcas del Estado nacional, y de los Gastos Totales, que fueron los desembolsos realizados durante el año pasado.
Es que, según el Presupuesto 2013, el ítem Recursos Totales ascendería a $ 629.217 millones, y sin embargo lograron percibirse unos $ 33.440 millones más, por lo que se llegó a los $ 662.657 millones.
Y, por el lado de los Gastos Totales, aunque la llamada ley de leyes estimaba erogaciones por $ 628.713 millones, el año pasado se terminaron ejecutando unos $ 748.585 millones, casi $ 120 mil millones más de lo previsto.
En términos porcentuales, esto significa que los Recursos Totales crecieron un 5% más que lo previsto al principio de 2013, mientras que los Gastos Totales se incrementaron un 19%. Por esta disparidad, el ejercicio anterior cerró con un déficit que es 170 veces superior al resultado calculado originalmente (que era superavitario).
Recaudación
El principal componente de los Recursos Totales son los Ingresos Tributarios, que representan un 58% de la recaudación del Estado nacional. Este ítem mostró en 2013 una performance casi idéntica a lo que preveía al comienzo del ejercicio, y trepó $ 358.206 millones.
En cambio, el envión de los Recursos llegó por el lado su segundo componente más importante: las Contribuciones, que engrosan los números de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES). La categoría aportó unos $ 201.406 millones, un 8,3% más de lo que se había calculado en el Presupuesto 2013.
El tercer componente de los Recursos, el concepto Rentas de la Propiedad, registra un incremento porcentual mucho más marcado, aunque en términos nominales su importancia relativa sea menor. Es que al comienzo del año se previó que el ítem recaudara unos $ 38.900 millones y finalmente el monto percibido ascendió a $ 57.856 millones, es decir un 48,7% por encima de las estimaciones iniciales.
Gastos
Por el lado de los Gastos Totales, la Finalidad que más se alteró con respecto a los números originales del Presupuesto fue la de Servicios Económicos, vinculada en mayor medida a la entrega de Subsidios al Transporte y la Energía.
En efecto, esta finalidad arrancó 2013 con un crédito inicial de $ 102.656 millones, pero cerró el ejercicio devengando unos $ 168.643 millones, es decir, un 64% más de lo previsto.
Asimismo, la finalidad Servicios Sociales había comenzado el año pasado con un crédito original de $ 395.607 millones, pero el monto finalmente devengado se incrementó un 17%, trepando hasta los $ 449.481 millones.
Hacia adentro de esta finalidad, la función Seguridad Social ejecutó unos $ 315.099 millones respecto de los $ 281.887 millones previstos; mientras que la función Vivienda y Urbanismo, que estimaba devengar unos $ 5.874 millones cerró el año con gastos por $ 15.015 millones.
Volviendo al análisis del Presupuesto según sus finalidades, aparece un ítem que, en lugar de incrementarse durante 2013, culminó el ejercicio con una ejecución de un 19% por debajo de los cálculos iniciales.
Se trata de la finalidad Deuda Pública. La subejecución de este rubro obedece a que el Estado nacional reasignó la partida original a otros destinos presupuestarios al concluir que no iba a tener que pagar los bonos ligados al crecimiento de la economía, conocidos como Cupones PBI.
Es que, según la reglamentación de estos instrumentos de deuda -surgidos tras los Canjes de 2005 y 2010-, sus tenedores obtienen ganancias cuando se cumplen pautas de crecimiento de la economía por encima del 3,22% del PBI real y, como la performance de los números de la Argentina no alcanzaron ese nivel, la Nación quedó exceptuada de cumplir con esa exigencia.
En números, de los $ 55.607 millones que la finalidad Deuda Pública tenía como crédito inicial, se terminaron devengando unos $ 44.796 millones. El resto, como se dijo, fue reasignado a otros ítems del presupuesto.
Financiación
Ahora bien, si el Estado gastó $ 119.870 millones por encima de lo calculado, pero recaudó sólo $ 33.440 millones más de lo previsto, la cuestión sería determinar cómo se financió el resto de esa diferencia.
Puntualmente, esos movimientos de fondos fueron instrumentados, por un lado, a través de la llamada Deuda Intra Sector Público (préstamos que el Estado se hace a sí mismo), y por el otro, con emisión monetaria.
Resultados parciales
No obstante, vale aclarar que estos datos representan resultados preliminares. Es que en los próximos meses, puntualmente durante el primer semestre de 2014, el Poder Ejecutivo nacional deberá elaborar la llamada Cuenta de Inversión y, una vez concluido ese paso, sí se podrán arribar a los números definitivos.
Según pasan los años
De confirmarse las cifras preliminares, el déficit del ejercicio 2013 ascenderá a $ 85.928 millones.
Esta performance representa casi el doble de la marca, también deficitaria, registrada durante 2012, que cerró con un resultado financiero negativo de $ 44.183 millones. Asimismo, el déficit 2013 es un 230,5% mayor al registrado durante 2011, que había culminado con un saldo negativo de $ 37.268 millones.
FUENTE: El Auditor.info http://www.elauditor.info/posts/show/5884

No hay comentarios:

Publicar un comentario

ARCHIVOS DE TEMAS DEL BLOG

Buscar articulos