miércoles, 4 de julio de 2012

Curuguaty, Paraguay: Que el árbol no nos tape el bosque
Por El Centro de Estudios Regionales
INFORMADOR PUBLICO
Los últimos acontecimientos sociales y políticos en Paraguay obligan a una profunda reflexión y una búsqueda de las causas que originaron el actual estado de cosas. El Centro de Estudios Regionales ha tratado de reunir las causas y analizar con absoluta imparcialidad los sucesos y sus consecuencias.
Hagamos un poco de historia:
San Francisco Labrador de Curuguaty, tal su nombre original, sufrió el 5 de junio de 2012, una acción desgraciada, un grupo de policías que iba a cumplir una orden de desalojo en el departamento de Canindeyú en la frontera con Brasil, fue emboscado por francotiradores, mezclados con campesinos que reclamaban tierras. La orden fue dada por un juez. El resultado por todos conocidos fue cuanto menos trágico.
El gobierno populista de Fernando Lugo quedó enfrentado con una realidad que no quería, no podía, o no sabía reconocer. Sus desaciertos fueron una constante y la oposición aprovechó el momento y lo llevó a juicio político en un Congreso dominado por la oposición; duro revés para el gobernante, resultado, Lugo destituido.
Curuguaty está ubicada al este del Paraguay, a unos 200 km de Asunción. Allí se halla la estancia Morombí, propiedad del terrateniente Blas Riquelme, con más de 70 mil hectáreas en ese lugar. Riquelme proviene de las filas de Stroessner (1954-1989) bajo cuyo régimen amasó una inmensa fortuna, aliado al general Andrés Rodríguez, quien ejecutó el golpe de Estado que derrocó a Stroessner. Riquelme, que fue presidente del Partido Colorado y senador de la República, dueño de varios supermercados y establecimientos ganaderos, se apropió mediante subterfugios legales de unas 2.000 Has, que pertenecen al Estado.
MST, Movimiento Sin Tierra
El paisaje del lugar es semejante al de la Mesopotamia argentina: tierra colorada, lomadas, vegetación no muy abundante y palmeras. La estrella de estos campos es la soja, el “oro verde” que cubre más de un millón y medio de hectáreas de los departamentos orientales. Sin embargo, la abundancia no llega para todos. El 2% de la población tiene el 80% de las tierras.
Con la activa participación del MST, en la última década la zona se ha convertido en el principal escenario de una violenta disputa entre campesinos y terratenientes, especialmente sojeros, que vieron incrementar su fortuna personal de manera cuantiosa y movieron los índices del crecimiento económico paraguayo a tasas superiores al 10% anual.
El hecho es, que un grupo de campesinos se habían instalado en el lugar con carpas de plástico un mes antes, junto a otros 150 “carperos” reclamando la subdivisión de esas 2000 Has que pertenecen a Blas Riquelme y otros políticos y empresarios “colorados”.
Un familiar de las víctimas, Mariano Castro, cuyo hijo Adolfo, de 26 años, murió en el lugar, reconoce que los “carperos” estaban armados. “Tenían escopetas para cazar animales y comer. No niego que aquí pudo haber un enfrentamiento. Pero esto ocurrió porque Lugo no hizo bien su trabajo. Cuando era candidato prometía la reforma agraria, nos decía que íbamos a tener títulos de propiedad. Nunca concretó nada., nos engañó”.
Los “brasiguayos”
Esta misma tierra de pobreza y tragedias es un paraíso para aproximadamente medio millón de brasileños que se radicaron en la zona a partir de los años 70. Son los llamados “brasiguayos”. Pertenecen en su mayoría a lo que se conoce como “los sin tierras”. Muchos de ellos hoy poseen grandes extensiones de tierra y son prósperos agricultores
Los “carperos” tienen derecho a un pedazo de tierra, “pero no se puede negar que entre ellos también hay gente de mala fe. Venden sus campos y luego se instalan en tierras ajenas para reclamar la posesión”. Esto lo dicen abiertamente vecinos del lugar y agregan que ven con entusiasmo la llegada de Federico Franco al poder.
El ingrediente que agrava la situación político-social de la zona es la violencia armada. En 2002 hizo su aparición en Asunción un grupo guerrillero llamado Ejército del Pueblo Paraguayo. Su acción más impactante en 2004 fue el secuestro y asesinato de Cecilia, la hija del ex presidente Raúl Cubas Grau.
“Esta guerrilla viró de sus orígenes urbanos para luego capacitarse junto a las FARC en Colombia, y convertirse en una milicia campesina que encontró una buena base de sustento en el conflicto paraguayo por la tierra”, según publico el diario ABC. Justamente el periodista de ABC perdió dos hermanos que murieron asesinados en 2001 y 2002 cuando realizaban investigaciones sobre los grupos de narcotraficantes que cultivan marihuana.
Hay que esperar las investigaciones -dijo-, pero mucha gente tiene la sospecha de que se habían infiltrado miembros de la guerrilla entre los “carperos”.
Lo sabremos cuando esté el resultado de las autopsias y se sepa si además de las armas de caza, que tenían los “carperos”, y el armamento que llevaba la policía, hubo otros tipos de fusiles.”.
Las multinacionales juegan su papel
En 2011, el Ministerio de Agricultura y Ganadería liberó la semilla de algodón transgénico Bollgard BT de la compañía Monsanto, para su siembra comercial en Paraguay. Las protestas campesinas y de organizaciones ambientalistas no se dejaron esperar.
El Servicio de Nacional de Calidad y Sanidad Vegetal y de Semillas, SENAVE, otra institución del Estado paraguayo, no inscribió dicha semilla transgénica en los registros de cultivares, por carecer de los dictámenes del Ministerio de Salud y de la Secretaría del Ambiente, tal como exige la legislación.
Durante los meses posteriores se libró una intensa campaña en los MCS, entre Monsanto y la Unión de Gremios de Producción, UGP, estrechamente ligada al Grupo Zuccolillo, (que publica el diario ABC Color y socio en varias empresas dedicadas a la agroindustria), y por la otra parte el SENAVE por no inscribir la semilla transgénica de Monsanto para su uso comercial en todo el país. A la guerra mediática se sumaron empresas internacionales vinculadas al negocio agrícola y organizaciones sociales, ecologistas y campesinas que no lograban ponerse de acuerdo.
El 8/06/12, la UGP publica en ABC a seis columnas: “Los 12 argumentos para destituir a Lovera”. Estos presuntos argumentos fueron presentados al en ese entonces, vicepresidente de la República, correligionario del ministro de Agricultura, el liberal Federico Franco, quien en ese momento se desempeñaba como presidente de Paraguay en ausencia de Lugo, de viaje por Asia.
El 15/06/12, en ocasión a una exposición anual organizada por el Ministerio de Agricultura y Ganadería, el ministro Enzo Cardozo dejo escapar un comentario ante la prensa que un supuesto grupo de inversores de la India, del sector de los agroquímicos, canceló un proyecto de inversión en Paraguay por la presunta corrupción en SENAVE. Nunca aclaró de qué grupo se trataba. En esas horas de aquel día se registraban los trágicos sucesos de Curuguaty.
Mientras tanto Monsanto presentó otra variedad de algodón, doblemente transgénico: BT y RR o Resistente al Roundup, un herbicida fabricado y patentado por Monsanto. La pretensión de la transnacional norteamericana es la inscripción en Paraguay de esta semilla transgénica, tal como ya ocurrió en la Argentina y otros países del mundo.Previamente, el diario ABC Color denunció sistemáticamente por presuntos hechos de corrupción a la ministra de Salud, Esperanza Martínez y al ministro del Ambiente, Oscar Rivas, dos funcionarios que no dieron su dictamen favorable a Monsanto.
Monsanto facturó el año pasado u$s 30 millones, libre de impuestos, en concepto de royalties por el uso de semillas transgénicas de soja en Paraguay. Independiente, factura por la venta de las semillas. Toda la soja cultivada es transgénica en una extensión cercana a los tres millones de Has, con una producción en torno a los 7 millones de Tns en el 2010.
Por otro lado, en la Cámara de Diputados ya se aprobó en general el proyecto de Ley de Bioseguridad, que contempla crear una dirección de bioseguridad a cargo del Ministerio de Agricultura, con amplia potestad para la aprobación, para su cultivo comercial, de todas las semillas transgénicas, ya sean de soja, maíz, arroz, algodón y algunas hortalizas.
Este proyecto de ley contempla la eliminación de la Comisión de Bioseguridad actual, que es un ente colegiado de funcionarios técnicos del Estado paraguayo.
Mientras tanto la UGP venía preparando un acto contra Fernando Lugo para el 25 de junio Se trataba de una manifestación con maquinarias agrícolas.
Una de las reivindicaciones del denominado “tractorazo” era la destitución de Miguel Lovera del SENAVE, así como la liberalización de todas las semillas transgénicas para su cultivo comercial.
Las conexiones
Las transnacionales del agronegocio en Paraguay prácticamente no pagan impuestos, mediante la férrea protección que tienen en el Congreso, dominado por la derecha. La presión tributaria en Paraguay es apenas del 13% sobre el PIB. El 60% del impuesto recaudado por el Estado paraguayo es el Impuesto al Valor Agregado, IVA.
Los latifundistas no pagan impuestos. El impuesto Inmobiliario representa apenas el 0,04% de la presión tributaria, unos 5 millones de dólares, según un estudio del Banco Mundial aún cuando el agro negocio produce rentas en torno al 30 % del PIB, que representan unos 6.000 millones de dólares anuales.
Cabe recordar que Tanto la Fiscalía o Ministerio Público, como el Poder Judicial y la Policía Nacional, así como diversos organismos del Estado paraguayo, están controlados mediante convenios de cooperación por USAID, la Agencia de Cooperación de EEUU.
El asesinato del hermano del jefe de seguridad del presidente Lugo, fue la primera alerta que recibió el ex Presidente y no lo entendió.
Conclusiones
* El gobierno de Fernando Lugo nunca pudo consolidarse. Contagiado por algunos de sus vecinos sudamericanos como Venezuela, Ecuador, Bolivia y Argentina, quiso imprimir una acelerada tendencia seudo progresista a su gestión. Tuvo por delante dos grandes errores, su amoralidad que contrastaba con lo que decía ser como ex sacerdote. Lo otro fue no conocer en profundidad la idiosincrasia de la sociedad paraguaya a la que quiso llevar hacia un progresismo para el cual no estaba preparada.
* Los lamentables sucesos de Curuguaty solo precipitaron el fin de un gobierno que desde el primer día erró el camino. Lugo jugó al progresismo y coqueteó con EEUU.
* Recordemos que avaló la aprobación de la Ley Antiterrorista, propiciada por EEUU en todo el mundo después del 11 S. Autorizó en 2010 la implementación de la Iniciativa Zona Norte, consistente en la instalación y despliegue de tropas y civiles norteamericanos en el norte de la Región Oriental -en las narices del Brasil- supuestamente para desarrollar actividades a favor de las comunidades campesinas.
* El Frente Guazú, coalición de las izquierdas que apoya a Lugo, no logró unificar su discurso, y sus integrantes pierden la perspectiva en el análisis del poder real, un poco por sus propias limitaciones y otro por la presión de poderoso Partido Colorado.
* Si pensamos que lo de Curuguaty involucra solamente a los paraguayos es porque vemos con un solo ojo. Curuguaty engloba un mensaje para la región, especialmente para Brasil, en cuya frontera se producen hechos violentos. Brasil está muy ocupado construyendo un poder mundial junto a Rusia, India y China, denominado BRIC.
* Sin embargo, EEUU no ceja en su poder de persuasión para con Brasil. Deberemos seguir de cerca el nuevo eje comercial integrado por México, Panamá, Colombia, Perú, Chile, liderado por EEUU. Es un muro de contención a los deseos expansionistas del Brasil hacia el Pacífico.
* China por su parte avanza desde el sur a través de Argentina en lo que se denomina una operación de pinzas. Es muy probable que en el mediano plazo asistamos a definiciones más específicas de uno y otro lado. Argentina está en medio de un conflicto que no conoce, que no tiene capacidad para manejar y lo peor aún es que ni siquiera puede elegir en que lado estar.
* Mientras, Washington sigue con su ofensiva diplomática en Brasilia, tratando de convencer al gobierno de Dilma Rousseff de estrechar vínculos comerciales, tecnológicos y militares.
* Por último, la destitución del ex presidente Fernando Lugo obedeció a un cúmulo de acontecimientos, que coadyuvaron en su conjunto al resultado conocido. Las cuestiones personales del ex presidente, y su manifiesta inmoralidad, sumada a las luchas sociales en la geográfica agropecuaria sostenidas y fogoneadas por grupos armados, más los intereses de grandes transnacionales (Monsanto) que no dudan en agitar e interactuar en el campo político, terminaron por esmerilar su cargo. La batalla político- económica en el Cono Sur está planteada, veremos si sus actores logran actuar en defensa de sus intereses.
Centro de Estudios Regionales
FUENTE:Publicado en www.informadorpublico.com

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