miércoles, 4 de julio de 2012

Si nos mienten con una lamparita…como será con el resto…
 Por Ricardo Bustos Columnista
El Presidente de la Fundación para la Defensa del Ambiente, Biólogo Don Raúl Montenegro, nos regaló otra sorpresa a todos los que no conocemos absolutamente nada de las lámparas “bajo consumo” al explicar que a pesar de ser muy eficientes…CONTAMINAN una vez que dejan de tener utilidad, es decir que muy seguido, pues otra mentira que nos vendieron era el tiempo de duración si la comparábamos con las famosas bombitas de vidrio que utilizamos toda la vida. “Las lámparas de bajo consumo ahorran energía, pero no ahorran contaminación”, porque tienen mercurio, metal pesado y peligroso que por su toxicidad si se rompe la lámpara puede ocasionar serios y graves problemas a nuestra salud, como irritación de garganta, tos, dificultad para respirar, inflamación de la piel, aumento de la presión arterial, náuseas, vómitos, cefaleas y pérdida de la memoria”, la pucha digo…y si seguimos con las velas?...todo esto por una lamparita y debe ser así nomás, pues “cuando la limosna es grande hasta el santo desconfía” nos decía el refrán y aún recuerdo cuando con bombos y platillos casi nos obligaron a cambiar todas las lámparas de la casa para reemplazarlas por estas porquerías que se queman igual o más seguido que las anteriores.
En este tema, el Estado tampoco es inocente dado que en el año 2006 las instituciones encargadas de controlar el sistema, elevaron un informe a la Secretaría de Energía de la Nación con los alertas sobre el tema y la manera en que se debía actuar en consecuencia cuando se rompía una de las tan famosas lámparas de bajo consumo, tan bajo que para iluminar más o menos bien, debemos adquirir una que cuesta no menos de 35 pesos e igual dejan de funcionar de un día para otro. Según se dice, por la toxicidad del mercurio, ante la rotura de una de estas lámparas se debe ventilar y abandonar el lugar al menos 15 minutos. Luego, con los ojos, la boca y las manos cubiertos, hay que recoger los fragmentos y el polvo con papel o cartón duro lastimándose todas las manos pues con los ojos cerrados ni el mago Mandrake puede ver los vidrios rotos y no usar aspiradora ni escoba y colocar los desechos en una bolsa plástica, aclarando que contiene residuos de mercurio, como si el buen hombre, recolector de residuos que viene corriendo a un costado del camión todas las noches va a mirar el cartelito que nosotros deberemos  colocar en el cesto de la basura en la vereda.
Esta exagerada e impetuosa forma de cambiar nuestra iluminación hogareña, obviamente también llegó a nuestras vidas de la mano de la corrupción y una vez más, también en Democracia, como si ese estado de vida, permitiera a los Dirigentes cometer atropellos que, además de costarnos un ojo de la cara, nos puede ocasionar problemas en la salud. En nuestro país, la mayoría de las medidas o cambios de hábitos a los que nos someten, están teñidos de intenciones políticas y así resulta siempre con las promesas sobre realizaciones que jamás veremos cumplidas.
Hoy, están poniéndose el país de sombrero y la sociedad se está recalentando, o sea que está muy caliente por todos los acontecimientos que son de dominio público, pero para los Gobernantes, todo aquello que tiene tufillo a queja, enojo, bronca o reclamo, es simplemente desestabilizador y así las cosas, los ciudadanos a los que nos tienen bastante cansados con sus falsas actitudes, nos estamos convirtiendo en “fachos, gorilas, nazis” o cuanta cosa estúpida se les cruce por la mente. Si partimos desde el engaño con una simple lamparita, no quiero imaginar cuantos más habrá que no llegan a nuestro conocimiento y nos perjudica de igual o peor manera sin que nos enteremos.
Los políticos, están jugando con fuego y la manguera de los bomberos no llega hasta el lugar del incendio, por ello como ciudadanos debemos reflexionar sobre la calidad que tienen quienes deciden por nosotros para sacarnos de esta maraña de enredos políticos a los que ellos y nadie más que ellos nos están llevando sin tener nosotros culpa alguna de los resultados nefastos que pueden llegar a ocasionar y todo por sus famosas internas políticas para ver quien ocupa un lugar importante y así decidir mucho más sobre nuestras vidas y no sobre las de ellos.
“Lo que me preocupa no es que me hayas mentido, sino que, de ahora en adelante, ya no podré creer en ti”.
Friedrich Nietzsche (1844-1900) Filosofo alemán
Ricardo Bustos
DNI 7788556  Resistencia-Chaco
 FUENTE:enviado por email por su autor

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