Por Carlos Arbía.
Especial para Cronista.com
El crecimiento anual del 7,6 % de la actividad económica de noviembre de 2011 medida a través del EMAE (Estimador Mensual Actividad Económica) que da el INDEC muestra que el consumo ha comenzado a frenarse desde agosto de ese año cuando la tasa crecía a un ritmo anual del 10,1 % en que el ritmo anual de crecimiento se redujo mes a mes. De todas formas el aumento mensual del 0,8 % de noviembre constituye uno de los más altos de la serie, solo superado por noviembre de 2010 cuando el aumento mensual fue del 1,7 %.
Lo cierto es que el número del EMAE de noviembre muestra que en principio el crecimiento de la economía argentina habría comenzado a perder fuerza y los datos anualizados de la AFIP en diciembre de impuestos claves para medir el consumo como el IVA y Debitos y Créditos Bancarios fueron los peores del año medidos en términos interanuales.
Pero con esta tasa de crecimiento y cuando solo falta computar diciembre la economía en su conjunto acumula un alza del 9,1% frente a una tasa de crecimiento proyectada en el Presupuesto 2011 del 4,5 %. Con estos datos de noviembre desde el ministerio de Economía que conduce Hernán Lorenzino se proyecta un crecimiento del PBI entre el 8 y el 8,5 % para el año pasado.
Pero más allá de las estimaciones de consultoras privadas lo cierto es que noviembre mostró una importante suba del consumo interno, que se reflejó en un alza del 3,9% en las ventas de los supermercados en términos interanuales. También las ventas en los grandes centros de compra, siempre en términos desestacionalizados, aumentaron en noviembre 20,6% con respecto a igual mes del 2010.
Por su parte la industria prendió una luz amarilla en noviembre al mostrar el EMI un aumento de solo el 3,5% en términos interanuales, y un incremento del 1,8% entre octubre y noviembre. El sector metalmecánico, excluido el automotriz impulsó el crecimiento fabril. En tanto, el comercio exterior, que venía apuntalando el crecimiento, mostró un menor dinamismo ya que las exportaciones solo aumentaron 17 % en términos interanuales en noviembre, cuando venían creciendo al 25%, mientras que las importaciones avanzaron el 12%, cuando aumentaban a un ritmo del 33 %. Con todo esto la balanza comercial dejó un superávit de 684 millones de dólares, producto de exportaciones por 6.920 millones, y adquisiciones por 6.236 millones. También tuvo un discreto desempeño el sector de la construcción, con un alza interanual de solo el 2,8%, si bien acumula un crecimiento superior al 9,0% desde enero a noviembre.
En lo que respecta a este año el Presupuesto 2012 computa una suba del PBI del 6 % en tanto que el BCRA modifico sus proyecciones de crecimiento y las llevo al 6,5 %.Por su parte el Banco Mundial bajó a mediados de enero su estimación de crecimiento de la economía al 3,7 %, desde el 4,2% que había hecho en junio, debido a que la crisis mundial afectaría también los precios de las materias primas, según detalló en el informe de "Situación y Perspectivas de la Economía Mundial". También desde los bancos del exterior se incluyen pronósticos de crecimiento pesimistas como el 1%, como del banco JP Morgan, hasta el 5% del Citigroup. En cambio entre las consultoras nacionales M&S calcula un crecimiento del 5 % en tanto que el Estudio Bein pronostica un 3,5% y Ferreres y Asociados un 3%.
Fuente:Publicado en www.cronista.com
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