SERAN DE 5, 10 Y 100 PESOS
El Central autorizó que Ciccone imprima 400 millones de billetes
La contratará la Casa de Moneda, que pagará 573 millones de pesos. La empresa está investigada por presunto lavado de dinero, en el llamado “caso Boudou”.
LaRazon
El Banco Central aprobó ayer el contrato para encargar la impresión de 1.205 millones de billetes de 5, 50 y 100 pesos a la Casa de Moneda. De ese total, la entidad estatal -que conduce Katya Dura- sólo podrá hacerse cargo de la impresión de unos 800 millones de unidades; el resto se imprimirán en la planta de la Compañía de Valores Sudamericana, la ex Ciccone, envuelta hoy en una polémica que alcanza al vicepresidente Amado Boudou y a sus presuntos socios. Se calcula que la ex Ciccone podrá facturar por ese trabajo unos 170 millones de pesos. El total que pagará el Central por los nuevos billetes serán 573 millones de pesos, el 40% de su presupuesto de este año.
En el mercado impresor se dice que, por la antigüedad de las impresoras, el costo de fabricación en Casa de Moneda es entre un 15% y un 20% más alto que los valores internacionales para este tipo de operaciones.
La contratación se decidió ayer por la tarde con el voto de la titular del BCRA, Mercedes Marcó del Pont, el vicepresidente Miguel Pesce, y cinco de los seis directores en funciones. No votó, ausente, el director Carlos Pérez, que llegó a ese cargo por sugerencia del ex titular del Central, Martín Redrado. Para dar luz verde al contrato, Marcó del Pont y el resto del directorio esperaron la aprobación del área legales del Banco Central, que dictaminó a favor de un punto clave: la posibilidad de que la Casa de Moneda pudiera subcontratar servicios a una empresa privada.
El dictamen legal fue firmado el miércoles por Marcos Moiseeff, al frente de la Subgerencia General Jurídica. Moiseeff es un funcionario de carrera que jugó un papel clave en el desplazamiento de Redrado del Central, a principios del 2010.
La ex Ciccone está investigada por la Justicia por presunto lavado de dinero, en la causa judicial que busca determinar si el vicepresidente de la Nación traficó influencias.
En el mercado impresor se dice que, por la antigüedad de las impresoras, el costo de fabricación en Casa de Moneda es entre un 15% y un 20% más alto que los valores internacionales para este tipo de operaciones.
La contratación se decidió ayer por la tarde con el voto de la titular del BCRA, Mercedes Marcó del Pont, el vicepresidente Miguel Pesce, y cinco de los seis directores en funciones. No votó, ausente, el director Carlos Pérez, que llegó a ese cargo por sugerencia del ex titular del Central, Martín Redrado. Para dar luz verde al contrato, Marcó del Pont y el resto del directorio esperaron la aprobación del área legales del Banco Central, que dictaminó a favor de un punto clave: la posibilidad de que la Casa de Moneda pudiera subcontratar servicios a una empresa privada.
El dictamen legal fue firmado el miércoles por Marcos Moiseeff, al frente de la Subgerencia General Jurídica. Moiseeff es un funcionario de carrera que jugó un papel clave en el desplazamiento de Redrado del Central, a principios del 2010.
La ex Ciccone está investigada por la Justicia por presunto lavado de dinero, en la causa judicial que busca determinar si el vicepresidente de la Nación traficó influencias.
FUENTE:Publicado por www.larazon.com
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