"Argentina pasó de la abundancia a la frazada corta", según economistas
22-11-11 11:40 Miguel Bein, Miguel Angel Broda y Miguel Kiguel reconocieron en el 'Encuentro de los Líderes' que el país “está frenando su economía” y que crecerá entre un 3,5% y un 4% el próximo año. En el plano global, resaltaron que el problema no es sólo económico sino político y que “alguien tiene que poner la plata, en este caso el Banco Central Europeo”.
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En el marco del “4° Encuentro de los Líderes” organizado por El Cronista, un panel de destacados economistas resaltaron que “Argentina está frenando” su economía y que “pasó de la abundancia a la frazada corta”. En tanto, en el ámbito global, coincidieron en que “el mundo está complicado” y que si “Europa no se encamina, va a hacer un ruido infernal”.
“No es un secreto que la economía argentina va a crecer mucho menos que lo que creció este año (8,2%). Probablemente sea más parecido al 7%”, dijo Miguel Bein, titular del Estudio Bein y Asociados. “Argentina está frenando” su economía y “siempre sucede después de un año electoral”, agregó.
“El primer ajuste ya lo hizo el mercado, más allá del show cambiario que vimos. Si el desafío era moderar la nominalidad de la economía, bueno ya se empezó hacer porque el ajuste monetario por las paritarias van a tener su primer test en febrero, por debajo del 20%. Si triunfa la agenda de la moderación y no de la no moderación, Argentina crecerá un 3,5% 4% el año que viene. Siempre y cuando el gobierno entienda que acá la situación cambió. No faltan dólares pero no sobran”, redondeó Bein.
Para Miguel Kiguel, Director Ejecutivo de Ecoviews, “Argentina paso a la abundancia a la frazada corta. Se perdió el superávit fiscal y con poca capacidad de endeudarnos. Al faltar financiamiento eso limita la política fiscal expansiva”.
Por su parte, el titular del Estudio Broda y Asociados, Miguel Angel Broda, “Argentina ha cambiado sustancialmente, se terminó el milagro de 9 años. Argentina ha vuelto a tener problemas: exceso de demanda de dólares; tasa de inflación alta; una dificultada de financiamiento fiscal que depende del Banco Central; y un sobre tamaño del Estado, una falta de modernización del Estado. La Argentina es vieja”, describió.
“Esto es un resfrío, no es lo que teníamos en otras épocas”, analizó Kirguel y planteó como solución “coordinación en la política fiscal y monetaria. Las políticas tienen que ser siempre expansivas, el Estado tiene que redistribuir el ingreso, tiene que intervenir en los mercados que no les gusta”, detalló.
“El futuro de la Argentina depende esencialmente de cómo se van condicionando los cuatro problemas objetivos con la ideología de los setenta del nacional populismo”, dijo Kiguel.
“La incertidumbre sobre la política económica de la Argentina es grande. Argentina pierde reservas porque tiene un problema objetivo, las reservas del Banco Central son 46 mil millones de dólares. Y el problema básico es el flujo porque no se puede endeudar con el exterior. En el mundo no hay bancos central que financie el agujero negro del gasto público”, afirmó.
“No es un secreto que la economía argentina va a crecer mucho menos que lo que creció este año (8,2%). Probablemente sea más parecido al 7%”, dijo Miguel Bein, titular del Estudio Bein y Asociados. “Argentina está frenando” su economía y “siempre sucede después de un año electoral”, agregó.
“El primer ajuste ya lo hizo el mercado, más allá del show cambiario que vimos. Si el desafío era moderar la nominalidad de la economía, bueno ya se empezó hacer porque el ajuste monetario por las paritarias van a tener su primer test en febrero, por debajo del 20%. Si triunfa la agenda de la moderación y no de la no moderación, Argentina crecerá un 3,5% 4% el año que viene. Siempre y cuando el gobierno entienda que acá la situación cambió. No faltan dólares pero no sobran”, redondeó Bein.
Para Miguel Kiguel, Director Ejecutivo de Ecoviews, “Argentina paso a la abundancia a la frazada corta. Se perdió el superávit fiscal y con poca capacidad de endeudarnos. Al faltar financiamiento eso limita la política fiscal expansiva”.
Por su parte, el titular del Estudio Broda y Asociados, Miguel Angel Broda, “Argentina ha cambiado sustancialmente, se terminó el milagro de 9 años. Argentina ha vuelto a tener problemas: exceso de demanda de dólares; tasa de inflación alta; una dificultada de financiamiento fiscal que depende del Banco Central; y un sobre tamaño del Estado, una falta de modernización del Estado. La Argentina es vieja”, describió.
“Esto es un resfrío, no es lo que teníamos en otras épocas”, analizó Kirguel y planteó como solución “coordinación en la política fiscal y monetaria. Las políticas tienen que ser siempre expansivas, el Estado tiene que redistribuir el ingreso, tiene que intervenir en los mercados que no les gusta”, detalló.
“El futuro de la Argentina depende esencialmente de cómo se van condicionando los cuatro problemas objetivos con la ideología de los setenta del nacional populismo”, dijo Kiguel.
“La incertidumbre sobre la política económica de la Argentina es grande. Argentina pierde reservas porque tiene un problema objetivo, las reservas del Banco Central son 46 mil millones de dólares. Y el problema básico es el flujo porque no se puede endeudar con el exterior. En el mundo no hay bancos central que financie el agujero negro del gasto público”, afirmó.
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