viernes, 11 de mayo de 2012

YPF: Kicillof controla a Galuccio, De Vido está fuera y las cuentas siguen sin cerrar
Por Guillermo Cherashny
INFORMADOR PUBLICO
Ya hay pruebas concretas de que Axel Kicillof tiene la última palabra en YPF. Por ejemplo, le habría hecho decir a la presidente la animalada de que Repsol importaba arena, como una crítica a la mala gestión de la empresa. La realidad es que tanto Brasil como Perú y Colombia importan una arena especial casi de cuarzo puro para que el petróleo siga fluyendo desde las rocas. Son indicios de la ignorancia en la materia de Kicillof, que es probable que repita en la petrolera su destructiva gestión de Aerolíneas Argentinas, que por ejemplo, no puede pagar los sueldos de abril a los pilotos y técnicos aeronáuticos. Es cierto que la recomendación de Miguel Galuccio por parte del gobernador Sergio Urribarri habría sido un acierto. Galuccio vivía en Londres, muy distante de las andanzas de La Cámpora, que ayer empezó a cometer actos de violencia, en este caso en la legislatura bonaerense y contra los productores agropecuarios que protestaban contra el aumento del impuesto inmobiliario rural.
Las cuentas siguen sin cerrar
La ignorancia y la improvisación que en el tema petrolero caracterizan a CFK y Kicillof contrastan entonces con la idoneidad y las buenas intenciones de Galuccio, muy bien considerado en ese mercado. El otro actor en este tema, Julio de Vido, habla cada vez menos con la presidente y no encuentra la forma de su pérdida de poder real.
Kicillof dedicaría ahora buena parte de su tiempo a investigar los daños ambientales de las petroleras, apoyando la campaña orquestada por su asesor Emanuel Agis y la Asociación de Superficiarios de la Patagonia La nueva estrategia consistiría no sólo en abarcar los daños que supuestamente produjo Repsol sino abarcar también a todas las petroleras que trabajan en el país. El gobierno es consciente de que YPF sólo controla el 30% del mercado de petróleo y gas y opta, como en todos los temas, por investigar el pasado sin mirar el futuro, un camino más que dudoso para llegar al autoabastecimiento. Es indudable que a Galuccio no le van a permitir que dé señales de precios a las empresas que quieran invertir, tomando en cuenta que a las empresas que extraen gas en boca de pozo se les paga en promedio 2 dólares con 70 centavos el millón de BTU pero a los usuarios se les cobra 50 centavos de dólar. Asustado por las consecuencias de un verdadero ajuste, el gobierno detuvo la eliminación de los subsidios en la Capital Federal y el conurbano. De este modo, si se les pagara a las empresas lo mínimo que reclaman, es decir, 5 dólares por cada millón de BTU, el desfasaje entre lo que percibirían los productores y lo que se les cobra a los usuarios sería el doble que ahora. Pero Kicillof no hace estos cálculos y lo único que parece importarle es que no aumenten las tarifas domiciliarias, que es sólo una parte del problema.
 Fuente:Publicado en www.informadorpublico.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario

ARCHIVOS DE TEMAS DEL BLOG

Buscar articulos